¡Prepara el popular helado de matcha!
¿Alguna vez has querido sorprender a tus amigos y familiares con un postre casero que combine una receta tradicional con un toque moderno y exótico de los ingredientes? Hoy te traemos una receta que es perfecta para esas ocasiones especiales: Helado de Té Matcha. Este helado no solo es delicioso y refrescante, sino que también es una forma estupenda de aprovechar los beneficios antioxidantes del té matcha. Con ingredientes simples y un poco de paciencia, podrás crear un postre que no dejará indiferente a nadie. ¡Vamos a sumergirnos en el proceso y descubrir cómo se hace este helado artesanal!
Ingredientes:
- 10 gramos té matcha en polvo
- 100 gramos azúcar
- 500 ml nata
- 500ml leche entera
- 4 yemas huevo
Preparación:
- Poner la leche a calentar en un cazo a fuego lento.
- La llevamos a ebullición, y en ese punto, añadimos el té matcha sin parar de revolver para mezclarlo bien.
- Retiramos el fuego cuando rompa a hervir, dejándola reposar unos 5 minutos, removiendo de vez en cuando.
- En un recipiente apto para usar en baño maría ponemos las yemas de huevo con el azúcar y mezclamos bien hasta obtener una pasta homogénea.
- Añadimos la leche tibia con el té matcha las yemas y mezclamos.
- Ponemos el recipiente al baño maría y cocemos a fuego lento sin parar de remover.
- Retiramos cuando comience a espesar, y seguimos removiendo un poco más.
- Apartamos y dejamos enfriar.
- Mezclar la nata con unas varillas eléctricas o de forma manual en un recipiente a parte hasta lograr una consistencia firme y punto de nueve.
- Vamos incorporando la mezcla anterior a la nata ya montada poco a poco, poniendo pequeñas cantidades y batiendo con las varillas para que la nata no pierda consistencia mientras se integran todos los ingredientes.
- Ponemos la mezcla en el congelador, y dejamos que pasen unas 2 horas para que se enfríe.
- Sacamos del congelador y batimos con la batidora para que quede más cremoso.
- Volvemos a meter en el congelador, y sacamos cada 2 horas para repetir la operación batiendo la mezcla 2 veces más. Así el helado queda mas cremoso, y no se derrite porque evitamos que se formen cristales de hielo en su interior.
- Una vez terminados los 3 ciclos de batido, reservamos el helado en el congelador cubierto con papel film, y dejamos pasar 24 horas hasta poder consumirlo.
Y ahí lo tienes, un exquisito helado de té matcha hecho en casa digno de una heladería gourmet. Cada cucharada es una explosión de sabor que equilibra perfectamente la dulzura de la nata y el azúcar con las notas terrosas y ligeramente amargas del matcha. Este proceso puede requerir un poco de tiempo y paciencia, pero el resultado final vale totalmente la pena. ¡Hasta la próxima, y feliz cocina!
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